'Hemos viajado más en esta gira que en el resto de nuestra vida: Australia, Japón, Canadá, ahora Europa... Intentamos visitar algo de cada país al que vamos, aunque hay veces que es imposible. Al principio teníamos más días libres, pero ahora es todo más frenético. Somos muy afortunados y estamos pasando por el mejor momento de nuestras vidas', aseguran al respecto de tanto viaje.

 

Tanto tiempo juntos y siendo hermanos, no sería de extrañar que estuvieran todo el día de uñas, pero nada más lejos de la realidad. 'Nos llevamos muy bien. Quizá puede que por lo que más discutamos sea por cuestiones musicales, a todos nos gusta aporta nuestra opinión, pero nos llevamos estupendamente', confiesan. 'El hecho de que tengamos diferentes influencias musicales hace que nuestra música salga también enriquecida y eso se ve en nuestras canciones', declaran.

 

No se imaginan compartir este momento tan dulce con nadie que no sea de su familia. 'Lo mejor de todo esto es que estás haciendo lo que quieres con la gente a la que más quieres del mundo', confesó Rydel. 'Y lo peor, que hay veces que te cortan las alas...', continuó. '¡Eso es porque tus ideas son muy malas!', bromeó el resto del grupo.